La parada militar volvió a ser la de años atrás, una PARADA MILITAR, en vista que desde hace años esta fecha se utilizaba para hacer  una especie de pan con mango tratando de incluir a instituciones civiles quitando de alguna manera protagonismo a las Fuerzas Armadas; no se puede decir a ciencia cierta si esto ultimo es cien por ciento correcto, pero ya el cargamonton que se hace desde hace años a miembros de las Fuerzas Armadas por ocupar cargos públicos es un indicador de como viene la mano, por lo menos desde el año 2000; justos pagan por pecadores, ese pasivo parece que puede revertirse con este nuevo gobierno; por lo menos en las carteras de Defensa e Interior los ex- miembros de las Fuerzas Armadas tienen una oportunidad para cambiar esa opinión que tiene cierto porcentaje de la población peruana, eso si existe un sector muy duro, pero minoritario, que con ninguna conducta o gestión harán cambiar esa posición anti-militarista (desde mi punto de vista), toda vez que ellos ven con muy alto riesgo una posible persecución con tendencia a desaparecer, si los militares nuevamente llegaran al poder.

Pero la suerte no esta del lado de este sector duro de la población, este pequeño grupo denominado CAVIAR (para centrar un poco el alcance de la población a la cual hago referencia), tiene como gran obstáculo el nuevo Presidente de la República, el cual es militar y por acto democrático ha sido elegido por el pueblo, siendo unas de las principales razones para ser elegido según la encuestadora Ipsos-Apoyo: El cambio-La mano dura-El orden-El ser militar- y ser Nacionalista; razones por la cuales ha florecido nuevamente este llamado histórico del pueblo  a sus Fuerzas Armadas en épocas de crisis; es cierto, no hay crisis económica, pero si existe una crisis social y un fraccionamiento de la sociedad empujada desde los más pobres.

Estos síntomas de la población han puesto en alerta a este pequeño porcentaje de la población peruana, que utilizando bien las redes sociales, las universidades (Principalmente la Universidad Católica), algunos periodistas y ONGs; hacen creer a la población que la corrupción, desapariciones, atentados contra los derechos humanos y libertad de expresión serán lo que pondrán en agenda estos nuevos militares en retiro nombrados; tratando de relacionarlos con personajes del régimen de Alberto Fujimori o con desapariciones de personas en los años 80; así hablan de concertación, de unidad, de igualdad de oportunidades? parece haber un doble discurso, donde la constante para este grupo es la exclusión de los miembros de  las fuerzas armadas en el desarrollo del país; Si ya lo se, indique que es un pequeño grupo representativo del país, Y por que tener miedo a este grupo si es minoritario?  porque desgraciadamente se apoyan del polarizado caso: Fujimori, para hacer eco a sus pretensiones, queriendo hacer ver que la mayoría del pueblo peruano apoya estas corrientes anti-militaristas, como las de mantener aislados a militares en retiro de toda actividad desde el ejecutivo.

Es de esta forma como esta población minoritaria del país, quiere poner en jaque al nuevo gobierno, intentando desacreditar la conducta de los oficiales en retiro elegidos en el ejecutivo; Cuando el país cerrara sus heridas? con un museo, encerrando a todos los militares culpables, arrinconándolos fuera del ejecutivo, reestructurando cada cambio de gobierno las FFAA; Sinceramente no creo que eso reduzca la brecha, hay todavía mucho por hacer; los miembros de las Fuerzas Armadas tienen una oportunidad histórica para alejar las sombras dejadas por el gobierno revolucionario de Velasco y de Fujimori, el camino esta hecho y la oportunidad en sus manos, eso sí,  el camino esta cuesta arriba, lleno de cuervos y obstáculos; no va ser fácil pero esta es una oportunidad de oro para que las Fuerzas Armadas puedan quitarse ese sin sabor que dejo los años 90, el nuevo presidente electo a depositado su confianza en ellos y esperemos que logren sus objetivos trazados por el bien del País.